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Masacre de Joe Kelly: el bocazas y su guionista definitivo

Un artículo de Rodrigo Arizaga Iturralde - Introducido el 10/07/2013

Aunque parece haberse relajado -relativamente- la fiebre que Marvel había desatado en torno al personaje de Masacre, es indiscutible que el mercenario bocazas se ha convertido en un cotizado personaje dentro de la editorial. Gozar de una nueva cabecera dentro del plan editorial Marvel Now, protagonizar en solitario un estupendo videojuego y tener una adaptación cinematográfica largo tiempo en desarrollo son la mejor prueba de su éxito.

Pero, puestos a buscar responsable, ¿A quién debe Masacre su éxito? Salido de los bocetos de Rob Liefeld, Fabian Nicieza fue el encargado de perfilar y desarrollar al personaje. También de escribir su primera aventura en solitario y mantenerle en el candelero durante sus años menos gloriosos en una colección compartida con Cable. Pero es otro guionista el que puede presumir de haber llevado a Wade Wilson a sus cotas más altas. Hasta el punto de que, aún hoy, su labor sigue siendo la más redonda e influyente de la trayectoria del personaje. Un guionista llamado Joe Kelly.



Reclutado por Marvel en plena época de crisis de los 90, Kelly obtuvo su primer trabajo de envergadura con la primera serie regular dedicada a Masacre. Junto a un entonces desconocido y vistoso Ed McGuinnes primero y Walter McDaniel después, Kelly agarró a Masacre dispuesto a exprimirlo a fondo. Recuperó buena parte de los personajes y argumentos de las miniseries previas para desarrollarlos –Comadreja, el ayudante pícaro; Siryn, el amor imposible; el Dr. Killebrew, responsable de su poder regenerativo y su horrible aspecto- y añadió otros de rápido calado en los lectores como Al la ciega –la rehén/compañera de piso/conciencia del protagonista-, T- Ray –némesis de Masacre de oscuro pasado- o el perro Deuce.



Kelly también se llevó al personaje fuera del coto de las series mutantes, poniéndolo en relación con otros personajes del universo Marvel como el Supervisor, Bullseye, María Tifoidea o Daredevil con interesantes resultados. Incluso se permitió la osadía de recuperar y resolver varios cabos sueltos de la continuidad, como explicar el origen de Maria Tifoidea en relación al trabajo de Frank Miller en Daredevil o descubrir en qué consistía la famosa organización Landau, Luckman y Lake (una trama que Chris Claremont creó para X-Men y que nunca resolvió). Y en lo que fue un ejercicio de pura genialidad, tuvo la ocurrencia de llevar a Masacre hacia atrás en el tiempo e introducirle en uno de los primeros números de Amazing Spiderman. Una odisea de paradojas temporales y cachondeo sin pausa sobre los comics de los 60 que merece ser enmarcada como una de las historias más graciosas de la década.



Kelly tenía un talento único para poner bromas referenciales y réplicas irónicas en la boca del protagonista. Pero también sabía ponerse serio y sacar a la superficie la amargura de un personaje que intenta reírse de todo y todos para no hundirse en la triste miseria de su propia existencia. El doloroso y deprimente recuerdo a sus días en programa Arma-X, su patética vida sentimental, su violento pasado o su sincero deseo de convertirse en un héroe a pesar de las zancadillas ajenas se dan la mano sin chirriar con las referencias a Bea Arthur y Cindy Crawford, la pasión por los tacos mexicanos o instantes en que el personaje rompe la cuarta pared y habla con los lectores. Características todas ellas que han acabado convirtiéndose en definitorias del personaje.



Con gran habilidad para encauzar las diferentes subtramas en un conjunto de lo más compacto y tras haber evitado la cancelación en al menos dos ocasiones, Kelly puso punto y final a su etapa tras treinta y cuatro números y tres especiales. Un trabajo que le valió ocuparse de cotizadas series como X-Men y JLA e iniciar proyectos más personales –Steampunk, Soy una matagigantes-. Un trabajo que marcó un antes y después sobre el personaje y que aún no ha sido igualado –aunque la etapa de Victor Glischer se le acerca. Masacre MAX es harina de otro costal-. La reedición de Panini en su línea Extra Superheroes supone una oportunidad de oro para poder apreciar el valor de esta etapa clave del personaje.


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