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Coleccionable New X-Men #1 El siguiente paso evolutivo.
Tras marcha de Chris Claremont una década antes, los comics de X-Men habían caído en la mediocridad, viviendo de las rentas sin la chispa de antaño. El aterrizaje Grant Morrison y Frank Quitely supuso un giro de 180º a dicha situación. Conscientes de la necesidad de un golpe de efecto que rompiese con la inercia previa, el dúo de autores escoceses abrió su etapa con la saga E de extinción, donde replantearon el status de los protagonistas como superhéroes, devolviendo la serie a su trasfondo inicial de metáfora sobre el racismo y la discriminación de minorías.
La presentación de Cassandra Nova, una nueva villana íntimamente relacionada con el pasado del profesor Xavier, supuso el disparo de salida para una historia que incluye el regreso de los centinelas, el exterminio de Genosha, el retorno del concepto de escuela para jóvenes mutantes y la incursión de nuevos (Xorn) y viejos (Emma Frost) personajes en el reparto protagonista. Un replanteamiento de la serie y sus protagonistas que, irónicamente, consistía en volver a las raíces que habían proporcionado su éxito a la cabecera. Filtrado, eso sí, desde una perspectiva tan rabiosamente personal y experimental como la del autor de Los Invisibles. En este aspecto resulta muy interesante consultar la propuesta original de Morrison –incluida en el tomo a modo de extra- y ver como en ocasiones se diferencia del producto final al proponer ideas aún más locas.
Esa renovación tiene su correspondencia gráfica, dejando de lado el dibujo limpio e impactante heredado de los 90 en favor de una estética más cruda y cargada de detalles. La labor de Quitely incluye el rediseño de los uniformes, dejando de lado las máscaras y los colores chillones para apostar por una estética más realista y militarizada en consonancia con las adaptaciones cinematográficas. Un planteamiento estrechamente relacionado con cambios introducidos por el guión como el nuevo aspecto animalizado de la Bestia ó el nuevo poder diamantino de la Reina Blanca.
A pesar de la gran cantidad de nuevos elementos contenidos en esta primera historia, Morrison también tiene tiempo para sus personajes. Su visión de la tensión conyugal entre Ciclope y Jean Grey, la angustia entre el intelecto y el físico animal de Hank McCoy, el carácter impulsivo y pendenciero de Lobezno o la ironía y el elitismo de Emma Frost –sin duda el personaje favorito del guionista- consiguen en un par de páginas más desarrollo que en todos los comics de la década precedente.
El primer tomo de esta nueva edición se cierra con la inclusión de un anual que sirve de presentación a Xorn, quien será el personaje más enigmático y polémico de toda la etapa. Una historia dibujada por Leinil Yu que tiene la peculiaridad de estar ilustrada en formato apaisado. Peculiaridad esta que el dibujante aprovecha al máximo para dotar de dinamismo y espectacularidad a las escenas de acción.
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