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Criminal Macabre: Husmeando en el lado oscuro

Un artículo de Rodrigo Arizaga Iturralde - Introducido el 30/12/2014

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Por su gusto compartido por los personajes siniestros, las atmosferas oscuras y los giros inesperados la serie negra y el terror siempre han encontrado facilidad a la hora de cruzar sus caminos. En el mundo del cómic, cabeceras como Hellblazer, Hellboy o la más reciente Fatale son algunos ejemplos de esa mixtura a la que puede añadirse por meritos propios Criminal Macabre.

Creada por Steve Niles, uno de los autores que más y mejor han cultivado el terror en viñetas durante los últimos años, Criminal Macabre narra las (des)venturas de Cal McDonald, un ex-policía reconvertido en detective privado con un don –o maldición, según se mire- único para verse envuelto en casos relacionados con lo oculto. Modelado según la tradición de la serie negra de protagonistas solitarios, fatigados y cínicos, Niles lleva el arquetipo más allá convirtiendo a McDonald en un adicto a las drogas, única manera que conoce para sobrellevar los horrores del mundo de lo sobrenatural.

Cal McDonald es un policía retirado con el don -o maldición- de atraer al mundo de lo oculto


Zombies, vampiros, hombres lobo, invocaciones demoniacas, conspiraciones ocultistas… son algunos de los elementos con los que el protagonista tiene que lidiar mientras intenta mantener su ya tambaleante cordura y no hundirse en la miseria. Pero aunque Niles retrata un personaje al límite también le dota de un ácido sentido del humor. A su alrededor dispone un plantel de secundarios como la escéptica teniente Brueger, su ex-novia la periodista Sabrina Lynch o el necrófago (sic) Morlock, convertido este último en inesperado ayudante del atormentando protagonista.

La fama del personaje se vio catapultada gracias a la colaboración de su creador Steve Niles con el atmosférico y siniestro Ben Templesmith


La trayectoria del personaje ha sido tan larga e interesante como errática y llena de paréntesis. En 1990 un primerizo Niles y el dibujante Jim Whiting crearon a McDonald en una historia corta para la antología Fly in my Eye, editada por Arcane Comix –sello editorial fundado por propio Niles-. El personaje reapareció cuando la editorial Dark Horse se interesó por él incluyéndolo en su cabecera Dark Horse Presents con una historia en cuatro partes dibujada por Casey Jones. Tras eso hubo que esperar seis años hasta que Niles recuperó al personaje en dos novelas en prosa. Sin embargo el boom comercial obtenido con 30 Días de Noche propició que escritor devolviese al personaje a las viñetas junto a Ben Templesmith, dibujante de la citada saga vampírica. La miniserie resultante -que adoptaba ya el título de Criminal Macabre- presentaba a McDonald investigando la existencia de una alianza entre vampiros, licántropos y otros seres de la noche para crear una epidemia que podría eliminar a la raza humana.

A lo largo de los años, nuestro protagonista se ha enfrentado a zombis, vampiros milenarios, sectas satánicas e incluso, monstruos clásicos como La Momia o Frankenstein


El éxito de esa historia propició una sucesión de miniseries y especiales que, pese a su carácter unitario y a una cadencia algo irregular, mantienen una solidad cronología argumental. En ellas McDonald hace frente a casos como una ciudad subyugada por una posesión demoniaca, una secta que intenta provocar el nacimiento del Anticristo, la aparición del vampiro Nosferatu -salido del film homónimo de Friedrich Murnau-, una estancia en la cárcel que adquiere tintes sobrenaturalmente siniestros o un encuentro con el mismísimo monstruo de Frankenstein. Aunque Niles es el responsable único del guión, el dibujo ha ido cambiando de manos pasando por autores como Kelley Jones (The Sandman), Kyle Hotz (Zombie: Simon Garth), Nick Stakal (Silent Hill) y Chistopher Mitten (Queen and Country), ilustradores de distinto estilo pero un don común para los ambientes siniestros y las criaturas terroríficas.

Criminal Macabre ha tenido cruces con infinidad de personajes como, por ejemplo, el llevado a cabo con El Bruto de Eric Powell


Convertido en un referente del cómic de terror, la popularidad de Criminal Macabre se ha extendido en un nuevo libro en prosa firmado por Niles, varios especiales, crossovers con series como El Bruto y la citada 30 días de noche –este último era inevitable- y la posibilidad de una adaptación cinematográfica protagonizada por Thomas Jane, colaborador de Niles y modelo del personaje para varias de las portadas de la serie. Editadas en España por Norma Editorial, aun existe un buen puñado de historias inéditas merecedoras de ver la luz en nuestro país.


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