Locke & Key Omnibus Volumen 2

Toca despedirse de uno de los mejores relatos que ha dado el Noveno Arte

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Aún recuerdo cuando Locke & Key terminó en mis manos por primera vez y cumplía todas las expectativas que había generado. La creación de Joe Hill y Gabriel Rodríguez es una de esas series que empiezan poco a poco, sin hacer demasiado ruido y, cuando te quieres dar cuenta, todo el mundo habla de ella para bien. El que no haya tenido la suerte de acercarse a ella debería poner remedio cuanto antes y mucho mejor del tirón, con estos maravillosos tomos que Panini ha puesto en circulación recientemente.

Locke And Key Omnibus Volumen 2 cierra una de las mejores lecturas de los últimos años, una obra llena de misterio y terror que ha cosechado reconocimientos por donde ha pasado. Una historia tan sencilla como eficaz en la que los autores nos sumergen en una trama protagonizada por tres hermanos que sufren una desgracia familiar, hecho que provocará una marcha forzosa para vivir en una nueva casa plagada de llaves que proporcionan increíbles habilidades al que las porta.


Algo que, a primera vista, no debería dar para mucho más se va convirtiendo en un intrincado relato lleno de giros inesperados y personajes que no son lo que aparentan, donde las traiciones están a la orden del día y el ansia de poder será el verdadero motor de la historia. No nos debería coger de sorpresa puesto que Hill es hijo de uno de los mayores genios de la literatura de terror, Stephen King, pero decidió no adoptar el apellido de su progenitor.

Este hecho le podría haber abierto las puertas en una industria tan dura como ésta, sin embargo optó por labrarse un nombre sin necesidad de “empujones” que pudieran proporcionar los lazos familiares. Para el que haya podido leer algunas de sus obras como Fantasmas, Cuernos o El Traje del Muerto sabrá que la valía del autor está más que contrastada y se ha convertido en un escritor a seguir con cada nueva publicación que aparece.


Los tres últimos arcos de la colección (Las Llaves del Reino, Mecanismos de Relojería y Alpha y Omega) despejan toda duda sobre las incógnitas que han ido apareciendo desde el principio de la serie. La experimentación de Ty, Bode y Kinsey con todas las llaves que van descubriendo dará pie a momentos inolvidables incluso algún que otro homenaje a otras colecciones míticas como Calvin & Hobbes o los clásicos Relatos Bélicos.


Si a todo esto añadimos algún que otro viaje en el tiempo para conocer el pasado de H.P. Lovecraft, llegamos a la recta final con un ritmo trepidante, donde todos los personajes tienen su importancia en el desenlace, momento en el que las múltiples tramas son resueltas con gran maestría, dejándonos con una sensación de haber leído un clásico en potencia. Además consigue algo muy difícil, una vez finalizada la lectura, ya se está pensando en volver a empezar.

Rodríguez, por su parte, también ha conseguido sorprender a los aficionados gracias a la evolución que ha experimentado su estilo a lo largo de la colección. Su trazo agradable y detallista no ha dejado indiferente a nadie, sobre todo, al ver cómo ha ido “mutando” hacia unos terrenos más complejos y espectaculares. Tal es así que con cada nuevo trabajo que firma, supone toda una celebración para el aficionado con buen gusto (atención a sus páginas en Little Nemo: Return to Slumberland).


No piensen que todo lo que se ha escrito y hablado sobre Locke & Key son exageraciones. Hemos tenido la suerte de que dos autores como Hill y Rodríguez estaban en el que posiblemente sea el mejor momento de sus carreras (y eso que aún tienen mucho que decir en el mundillo) y eso se ve reflejado en el resultado final, uno de los mejores comics de todos los tiempos. Solo diremos cuatro palabras a modo de despedida, Tales From The Darkside, la nueva cabecera en la que se han juntado estos dos genios. Ya veremos.