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Marvel Saga - El Castigador de Ennis y Dillon #7: La Conjura de los Necios Llegando al final de este Frank Castle
Un artículo de
Redacción
-
Introducido
el 05/04/2025
Marvel Saga - El Castigador de Ennis y Dillon #7: La Conjura de los Necios USA - 2025 Guionista:Garth Ennis Dibujante:John McCrea
Editorial:Panini Cómics -
128 páginas - color
Precio:19,00€
Hace casi veinticinco años que Garth Ennis, uno de los guionistas más provocadores y brutales del cómic contemporáneo, llevó su estilo visceral y sin concesiones al mundo del Castigador. Con una narrativa marcada por la violencia descarnada, el humor negro y una crítica implacable a los convencionalismos del género superheroico, la etapa de Ennis y Steve Dillon irrumpió en España para presentarnos la versión más irreverente y feroz de Castle, dejando una huella imborrable en la memoria del lector. Tras múltiples reediciones parciales en formatos como Marvel Must-Have y otras líneas, es finalmente con esta edición cuando Panini nos entrega una edición definitiva, completa y con las dimensiones originales, cerrando así una prolongada espera.
En las entregas finales presentadas en los últimos volúmenes, Ennis, despojado ya de la complicidad gráfica de Dillon –cuya mención aquí adquiere un carácter simbólico más que efectivo–, construye una recapitulación ácida y crítica de los elementos que dominaron su prolongada andadura narrativa. Personajes como el desafortunado Spacker Dave regresan para subrayar, con cinismo descarnado, la grotesca humanidad tan característica del autor. Mediante flashbacks estratégicos revivimos momentos clave de la icónica miniserie original, cerrando también la hilarante aunque patética trayectoria del detective Soap con una conclusión que destila el humor más negro marca Ennis. La escena final, a modo de homenaje autoconsciente, cierra magistralmente el ciclo con una referencia al arranque de su propio Castigador en Marvel Saga, culminando así en una suerte de círculo vicioso que refleja la esencia misma del antihéroe.
Sin embargo, aunque el título de la saga referencia grandes exponentes literarios, aquí no se trata de elevar al Castigador como genio incomprendido, sino de evidenciar la mediocridad de sus adversarios, representados en la figura de Daredevil, Spiderman y Lobezno. Cada uno encarna una sátira específica: Daredevil es el moralista autocomplaciente; Spiderman, la banalidad jocosa e inútil; y Lobezno, la agresividad orgullosa y machista. Esta fijación crítica anticipa, en cierto modo, la posterior creación de The Boys, aunque el reiterado sarcasmo contra el arquetipo heroico podría sentirse excesivo e incluso algo desgastado por la repetición constante.
Desde el punto de vista artístico, aunque John McCrea realiza un trabajo sólido y dinámico, beneficiándose de la química creativa ya demostrada junto a Ennis en Hitman, la ausencia prolongada de Dillon deja una inevitable sensación de orfandad visual. McCrea aporta un estilo fluido y enérgico, pero carece del trazo limpio y la expresividad sombría que Dillon imprimió indeleblemente en esta saga. Los dos últimos arcos, Las Calles de Laredo y La Conjura de los Necios, aun siendo visualmente efectivos, no logran desprenderse completamente de una cierta nostalgia por la identidad gráfica perdida, clave esencial del éxito inicial de esta celebrada etapa del Castigador.
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