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Chew #9: Palitos de Pollo Comic Digital
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"'Estaré fuera volándome los sesos, General Furia'. 'Procure no salpicar'." (Carol Danvers y Nick Furia / Special Ultimates & Ul. X-Men #4)
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Chew #9: Palitos de Pollo

Jugando con la comida

Un artículo de Rodrigo Arizaga Iturralde - Introducido el 18/01/2016
Chew #9: Palitos de Pollo
Chew #9: Palitos de Pollo USA - 2015
Guionista:John Layman
Dibujante:Rob Guillory
Editorial:Planeta Cómic - 160 páginas - color Precio:16,95€
PUNTUACION
4/5

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Resulta bastante difícil expresar las virtudes de una serie como Chew a alguien que no la conoce previamente. También es complicado explicar el propio concepto de una serie ambientada en un futuro donde el pollo es ilegal debido a la gripe aviar y su protagonista, Tony Chu, es un agente federal con la habilidad de obtener impresiones psíquicas de aquello que come. Y aun más arduo es exponer los motivos por los que semejante premisa funciona tan bien sin que buena parte de la gracia se pierda por el camino.


Asimismo resulta peliagudo discernir cuantas de las virtudes de la serie son obra del guionista John Layman y cuantas del dibujante Rob Guillory. La chiflada imaginación del primero y su talento para dar entidad a los personajes más absurdos y los diálogos más tronchantes encuentra su perfecto complemento en las caricaturescas y dinámicas ilustraciones del segundo, capaz de plasmar las escenas más salvajes e irracionales sin que la trama se descontrole o el lector pierda el interés


Los números incluidos en el presente tomo (#41-#45 USA) incluyen una boda en las Vegas abortada por el ataque de una secta de adoradores de los huevos (sic), el asesinato de un agente foca (sic) en un complejo científico submarino y otras misiones absurdas encomendadas a Chu por su odiado superior. Paralelamente, sus compañeros se alían con el agente renegado Mason Savoy y la sobrina del propio Tony para dar caza al villano conocido como el Coleccionista –un asesino con las mismas habilidades que el protagonista y que se hace pasar por un vampiro.


Los enloquecidos gags de Layman y sus descacharrantes diálogos no impiden sin embargo ver el trabajo en la construcción de una cuidadosamente planeada trama de misterio o su talento para el desarrollo de unos personajes que demuestran tener más capas que la que su paródica apariencia deja ver en un primer vistazo. Asimismo, el uso de flashbacks y flashfowards para profundizar en los personajes, los textos de apoyo constatando lo ridículo de ciertas situaciones, los pequeños carteles con mensajes publicitarios a modo de chascarrillo o digresiones argumentales como esas ocasionales ilustraciones a doble página mostrando el enfrentamiento entre Poyo –un gallo cibernético agente federal (sic)- y otras bestias fantásticas demuestran las habilidades narrativas de guionista y dibujante. El presente tomo incluye un número especial protagonizado por el citado Poyo que sirve de coartada a Layman y Guillory para parodiar con bastante mala leche el género de la fantasía en general y algunas de sus obras más conocidas –El Señor de los Anillos, Las Crónicas de Narnia, John Carter-.


Planificada con una extensión de sesenta números, Chew enfila su recta final manteniendo intacta la formula que ha hecho de ella una de las series más originales y divertidas del comic USA más reciente. El inesperado giro sorpresa mostrado en la última página no hace más que reforzar el interés por la siguiente entrega.


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