|
Vengadores: el Supervisor Huida hacia adelante
Vengadores: el Supervisor EE.UU - 2010 Guionista:Fred Van Lente Dibujante:Jefte Palo
Editorial:Panini -
104 páginas - color
Precio:9,5
Durante años el Supervisor se ha forjado una reputación en los círculos criminales de medio mundo. Pero cuando alguien ofrece una recompensa millonaria por su cabeza se convierte en el blanco de todas las organizaciones del planeta. ¿Quién está detrás del asunto? ¿Cómo podrá sobrevivir a semejante caza? ¿Y porque no recuerda nada al respecto?
Ritmo sin pausa. Así se podría definir la miniserie recopilada en este tomo agrupado (un tanto descaradamente) dentro de la línea Vengadores y que otorga el protagonismo a un interesante personaje que había permanecido durante décadas en un discreto segundo plano. El Supervisor, el hombre de los reflejos fotográficos y conectado con la mayor parte del universo Marvel, ya había dado muestras de su potencial durante la serie de La Iniciativa. Ahora, de manos de Fred Van Lente (Increíble Hércules), el Supervisor se convierte en el conductor de una trama de acción e intriga donde se van sucediendo acciones (la pelea sobre un tren, el ataque al restaurante por ocho grupos criminales…a la vez), personajes (narcos carnavalescos, inquisidores, moteros alienígenas, adoradores sudamericanos de Hitler) y escenarios (la Gran Vía madrileña, la frontera mexicana, los Alpes) a cada cual más variado y/o delirante que el anterior.
La gran virtud de semejante conjunto es el ritmo endiablado que Van Lente da a la trama, que engancha a lector con una facilidad pasmosa ayudada por unos diálogos rebosantes de chispa –especialmente los que tiene lugar entre el Supervisor y su acompañante/rehén- y unido a varios giros de corte dramático que nos hacen contemplar desde un punto de vista bien distinto al villano protagonista. La verdad es que cuesta creer todo lo que incluye la historia en apenas cuatro miserables números y lo bien desarrollada que está. Tanto que incluso se le perdonan ciertos elementos que trastocan de forma discutible la continuidad del personaje. El dibujo de Jefte Palo (Pantera Negra) sabe potenciar las virtudes del guión con una narrativa ágil y rápida, visualizando asimismo de forma ingeniosa la habilidad del protagonista para imitar los movimientos de otros personajes. El balance final resulta ser una agradable sorpresa que corre el peligro de ser ignorada por novedades de mayor renombre, y es merecedora una mayor atención.
|
|
|
