Liga de la Justicia #1: Las Máquinas de la Extinción Bryan Hitch enfrenta a su Liga de la Justicia a la amenaza de “Los Parientes”
AVISO: Éste artículo contiene posibles spoilers. En él se revelan aspectos argumentales que el lector podría preferir descubir por sí mismo.
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Debe resultar excepcionalmente complicado escribir historias para la Liga de la Justicia. Si ya es difícil centrarse en uno de sus personajes principales y darle en cada nueva historia un enfoque interesante y fresco, dirigiéndose a lectores que hace años que disfrutan de sus aventuras, imaginad la coordinación que debe llevarse cuando se trata de que cada miembro del equipo de héroes tenga su momento, su propia subtrama con algo que contar y, al mismo tiempo, no se pierda el sentimiento de equipo que promete este tipo de series. Y a esto debemos añadir que se trata de la primera historia de la etapa Renacimiento, que supone bastantes cambios para los personajes, lo que significa contar con ellos pero no poder desvelar algunos giros de guión que han de contarse en la serie regular del personaje, como sucede con Superman y al que luego dedicaremos especial atención.
Por eso resulta tan increíble que el encargado de esta nueva etapa de la Liga sea un dibujante reconvertido en guionista. Bryan Hitch supo llamar mi atención con El Poder y la Gloria, una fantástica historia que se encargaba de escribir y también de dibujar, en la que dejaría claro su cercanía con títulos como Authority, por la creación de relatos en los que enfrentar a los personajes a amenazas cada vez más grandes, capaces no ya de destruir la ciudad o los Estados Unidos, sino de cargarse toda la Tierra de un plumazo. Hitch supo darle a esta saga toda la grandilocuencia necesaria sin perder de vista a los miembros que componían esta Liga de la Justicia, sus miedos e inquietudes, con un estilo de narración que iba saltando de un personaje a otro, algo que ha sabido mantener en esta nueva etapa que ahora comienza.
El primer número del tomo, publicado como especial Renacimiento de la serie, con dibujos del propio Hitch sienta bien las bases de los que vamos a encontrarnos en el resto del tomo, una amenaza a escala planetaria que no se parece en nada a lo que la Liga de haya enfrentado. Cuatro enormes seres que bien podrían hacer salido de los Celestiales han llegado a la Tierra, precedidos de grandes terremotos, y de una enorme destrucción. Su misión, realizar una inevitable purga con los seres humanos que habitan el Planeta, algo que la Liga de la Justicia deberá impedir. La acción se divide para cada uno de los personajes y así comprobaremos cómo el fondo del mar también ha sufrido la llegada de estos seres, acompañada de devastadores tsunamis, algo sobre lo que Aquaman tendrá mucho que decir, o ver como Flash ha perdido de forma repentina toda su velocidad, y Batman trata de mantener el orden en una Gotham al borde del colapso. Así, y durante las cinco entregas de la saga, tendremos tiempo de acompañar a los nuevos Green Lantern y verlos interactuar o conocer algo más del nuevo Superman. Recordemos que Superman se sacrificaba al final de la etapa de Los Nuevos 52, en la también recomendable saga Los Últimos Días de Superman, lo que genera mil y una preguntas sobre su regreso, acompañado de Lois Lane y hasta de su hijo.
Después del número dibujado por Hitch, tenemos a correcto Tony Daniel como dibujante regular, que se toma su tiempo para dejarnos unos buenos resultados, que suponemos no le alcanzan para seguir el ritmo quincenal de la serie, siendo relevado por Jesús Merino en algunas entregas. Un comienzo prometedor, sobre el que sólo sobrevuela el temor a que Hitch se quede sin enemigos más grandes que la vida contra los que enfrentar a su equipo de héroes.
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