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Marvel Must-Have - El Castigador: Círculo de Sangre Un hombre con una misión
La línea Marvel Must-Have sigue dándonos alegrías cada mes, con series regulares o etapas de mayor extensión, como Los Vengadores de Brian Michael Bendis, que está recuperando en varios volúmenes, junto a otros que nos llegan en un único volumen, como esta miniserie del Castigador que ahora nos llega. Hablamos de Círculo de Sangre, una de las mejores historias del personaje que, a pesar de haberse recuperado hace algunos años en formato 100% Marvel, hace tiempo que pedía una reedición. Ahora podemos encontrarla de nuevo en las librerías, como un punto de partida perfecto para aquellos lectores que lo conozcan por su paso por televisión, y quieran saber más sobre este fascinante, aunque polémico, personaje.
Después de una breve pero efectiva introducción en la que se nos resume el origen del personaje, su tormentoso paso por Vietnam y su justificada sed de venganza, nos encontramos con nuestro protagonista entre rejas, tratando de sobrevivir en la prisión de Rykers, en la que comparte espacio con muchos criminales a los que ha ayudado a encerrar, cosa nada recomendable. Allí se encontrará con Billy Russo, también conocido como Puzzle, sobrenombre que recibió después de que el propio Frank le dejase la cara hecha unos zorros, que será fundamental en la huída de prisión y en las tramas que llegarán a continuación.
En las siguientes páginas conoceremos al Trust, una organización de ciudadanos que ha decidido acabar con el crimen, y como tiene medios económicos suficientes, va a contratar a Frank Castle y sus poco sutiles métodos para que les ayude para cumplir este noble propósito. Por supuesto, conforme el Castigador se vaya haciendo cargo de distintos trabajos, comprobará que nada es lo que parece, y que las intenciones del Trust para contar con sus servicios y señalar los objetivos de los que quiere que elimine ocultan muchas cosas que ha pasado por alto. Por supuesto, llegado el momento, Frank no dudará en volver a hacer lo que mejor sabe: tomarse la justicia por su mano y saldar cuentas con el Trust.
Del dibujo se encarga Mike Zeck, que llegaba después de haberse hecho cargo de las primeras Secret Wars y saborear las mieles del éxito. Aquí hacen un estupendo trabajo en los primeros números, pero su arte queda un poco deslucido en la segunda mitad, llegando a necesitar de la ayuda de otros artistas para que hicieran los bocetos, imaginamos que debido a los apremiantes plazos de entrega. Solo esperamos que Panini decida recuperar también Regreso a la Gran Nada, secuela de esta primera miniserie y a cargo del mismo equipo creativo, que ampliaba la leyenda del Castigador con mucha eficacia.
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