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Warlock: Renacimiento Adam Warlock hace un inesperado regreso al Mundo del Alma
Con cada nueva miniserie que nos llega de la mano de Panini queda claro que en Marvel han apostado por los lectores veteranos a la hora de diseñar nuevos proyectos, y que el factor nostalgia sigue estando muy presente en las nuevas historias que mes a mes nos ofrece la editorial. Si en los meses anteriores veíamos como los autores originales volvían a determinadas etapas de sus personajes, como Peter David y su Hulk gris, o de nuevo David y sus peculiares 4 Fantásticos, que heredaba de Walter Simonson, ahora nos toca volver a esas historias cósmicas que tan buenos ratos nos hicieron pasar, en las que Jim Starlin tuvo mucho que ver, con etapas tan fascinantes como la del Guantelete del Infinito.
En este caso tenemos a Ron Marz como guionista, un autor clásico que sabe adaptarse a la forma de narrar que Starlin tenía, y que encima llega acompañado por Ron Lim, un dibujante que se hizo cargo de muchos números de la serie regular de Estela Plateada, y que tomase el relevo de George Pérez en la mencionada saga del Guantelete del Infinito, para convertirse en el dibujante oficial durante muchos años del lado cósmico de la editorial, firmando las siguientes sagas, La Guerra del Infinito y La Cruzada del Infinito, y acostumbrado por tanto a contarnos las andanzas de Adam Warlock y el resto de personajes.
Warlock: Renacimiento, la serie limitada de cinco números que ahora recoge Panini en tomo, recupera al personaje en la etapa en la que compartía cabecera con otros héroes, en la serie Warlock y la Guardia del Infinito, y que tenía al grupo como protectores de las preciadas gemas del infinito. Parte de la sorpresa de esta historia la tenemos en quién regresa al grupo o no, y no debemos olvidar que se sitúa justo después de la primera saga del Infinito, pero Marz sabe lo que se hace, y por eso inventa a Eve Warlock, una especie de contrapartida femenina de Adam que será muy importante en estas páginas.
Aunque, como decía, la serie pueda estar pensada para lectores veteranos que añoran las historias de Starlin, el guionista consigue resumir en las primeras páginas el punto de partida para los personajes, consiguiendo que cualquier lector novato pueda disfrutar también de esta propuesta, en la que Ron Lim consigue que realmente parezca que no ha pasado el tiempo, y que se trata de otra historia más de los personajes, con ese aire noventero de acción y aventuras que tanto disfrutamos en su momento.
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