Joe Madureira: 'Cuando empecé a dibujar los X-Men, la gente odiaba mi estilo' El creador del ameri-manga
AVISO: Este texto fue publicado en nuestra Edición Impresa en el número de Diciembre
Lo que más sorprende al conocer en persona a "Mad" es su cara de niño. ¿No llevamos disfrutando de sus fastuosos dibujos un par de décadas? Quizá olvidamos que empezó muy pronto en esto. Pero él es cercano, amable... incluso un tipo bastante gracioso. Sientes más que estás hablando con un fan que con uno de los 10 dibujantes más influyentes de los 90, según la revista Wizard. Todo un genio a los lápices que ha exportado su arte de los cómics a los videojuegos. Aunque el hijo pródigo volverá. Seguro.
A todas luces fuiste un talento precoz. Mirándolo ahora con perspectiva, ¿crees que benefició a tu carrera o consiguió que te quemases demasiado pronto?
¡Oh tío! Me di a la bebida, a las drogas, al crimen y fue terrible, casi muero (risas). No hombre, yo creo que fue algo muy bueno. No era el mejor estudiante en la universidad y lo único que se me daba bien era dibujar. Era mi único talento. Mi padre siempre me decía que me metiese a electricista o algo práctico con lo que ganarme un sueldo, pero dibujar era lo único que realmente se me daba bien, así que para mí fue una suerte poder empezar tan pronto. Me permitió seguir con el dibujo e ir mejorando mi estilo. Sino, no sé que sería de mí hoy en día. Quizá un arquitecto... quién sabe.
De hecho, fueron muchos los dibujantes que intentaron copiar tu estilo e incluso se creó una tendencia en los 90. Algunos se mantienen hoy en día...
Cierto, aunque siempre dije que no llegarían lejos. Cuando alguien copia una idea, nunca va a poder competir con el original y eso es lo que ha ocurrido.
Lo que sí que es sorprendente es cómo la gente seguía comprando tus cómics sólo por el dibujo en una época que, tras la salida de Claremont, no fue del todo buena para los mutantes.
¡Eso sí que me enorgullece! Creo que quizá la gente le dio más importancia al dibujo, que es un factor vital en un cómic, que al guión. Y no me puedo quejar por ello.
Hablando de tu paso por las colecciones mutantes... Allí redefiniste el aspecto físico de algunos personajes, como aquel Lobezno salvaje con garras de hueso o un Ángel más violento. ¿Con qué personaje te quedarías?
Uff, difícil respuesta. Podría decir Lobezno, pero es lo que dice todo el mundo. Así que voy a optar por Rondador Nocturno.
Cuando empecé a leer X-Men descubrí el arte de John Romita, Paul Smith y John Byrne y cuando pienso en la Patrulla-X, ésa es la época que me viene a la cabeza, con Coloso, Rondador y Tormenta. Me encanta Rondador, su aspecto misterioso y cómo es dibujarlo. De repente desaparece y nadie sabe dónde está. Y no es tan poderoso, realmente, como sus compañeros. Es un tipo raro, en parte frágil, por eso me encanta.
Ya desde tu época en las colecciones mutantes te empezó a costar terminar un número al mes, hecho que se fue acrecentando hasta que en Battlechasers o los Ultimates llegaron a pasar años para ver un nuevo ejemplar con tus dibujos. Muchos fans te pusieron la cruz por ello y es el aspecto por el que más se te ha criticado a lo largo de tu carrera. ¿A qué se deben los retrasos? ¿Falta de inspiración, de tiempo...?
La cuestión es que soy un loco con los detalles. A veces, si me tiro cinco o seis horas dibujando algo y no me gusta, opto por tirarlo a la basura. A veces es más fácil empezar de cero que ir retocando un dibujo una y otra vez, lo cual me frustra bastante. Sé que no es la mejor forma de trabajar. Realmente miro muy atentamente cada cosa que dibujo e intento hacerlo mejor que la vez anterior. Miro mis trabajos de hace unos años y me parecen tan horribles... ¡No me puedo creer que Marvel se dignase a publicar semejantes cosas y me diese un trabajo! Aunque les estoy agradecido de que lo hiciesen. Si miro hacia atrás uno o dos años y no veo una mejora en mi trabajo me pongo muy triste. Así que me tomaré el tiempo que haga falta, haré que la gente se enfade conmigo... lo que sea con tal de que mis dibujos queden bien.
Lo que me hace gracia cuando los fans se enfadan es que su cómic saldrá el mes que viene, pero el que el que no va a cobrar hasta que salga soy yo. Entiendo que la gente esté expectante, pero me niego a sacar algo que no me convenza.
Y creo que lo importante es que en el futuro tengas un cómic brillante y no te acuerdas de lo mucho que esperaste a que saliera. Os quiero chicos, os quiero. (Risas).
Respecto a esto, la industria norteamericana está montada de tal modo que cada mes hay que sacar un nuevo ejemplar a la venta. En cambio, en Europa, es todo lo contrario. Los autores se toman el tiempo que haga falta y no son pocos los dibujantes que han cruzado el charco. ¿Has pensado en ello?
Sí, la verdad es que tendría que moverme a Europa. ¡Aquí no estaría tan presionado!
Hablando de proyectos propios: tú creaste Battlechasers. ¿Hasta qué punto sientes más como tuyo y te esfuerzas más por un producto que has creado tú mismo?
Efectivamente, para mí la parte creativa es la favorita del proceso. Lo más divertido siempre es el principio, cuando estás dando forma a los personajes y sacando ideas. Lo malo en Battlechasers es que la gente quería que fallara. No me preguntes porqué. Y al principio no gustó, pero más adelante sí. Estoy muy orgulloso del resultado final.
Pero la serie se quedó a medias.
¿Veremos algún día su conclusión?
(Cara de resignación). Oh... ¡La eterna pregunta! Espero que sí. Ahora mismo estoy centrado en el mundo del videojuego y en que todo salga bien con Darksiders, pero sí que quiero terminar lo que comencé. Igualmente, hay un montón de proyectos que tengo en mente en el mundo de los cómics. Me encantaría dibujar a Spiderman, por ejemplo. No sé cuando ni cómo, pero sí que algún día volveré.
(Le intentamos sonsacar algo más sobre su vuelta al mundo del cómic y su paso por los Ultimates pero se muestra reticente a contestar. Toca hablar sobre su última obra).
¿Conseguirá Darksiders que los fans te vuelvan a ver dibujando un cómic?
(Risas) La verdad es que todo el mundo me lo pregunta y yo creo que sería algo extraño que en uno o dos años no me obligase THQ a dibujar uno. Lo más seguro es que sí.
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